Rubén Castiñeiras, más conocido como “El Pepo”, fue liberado este lunes por decisión judicial al considerar que había cumplido su condena. El cantante de cumbia había sido sentenciado en diciembre de 2022 por un accidente de tránsito en el que fallecieron dos miembros de su banda. Estaba cumpliendo prisión domiciliaria en su residencia en Santos Lugares, con una condena de cuatro años y siete meses de cárcel.
En el marco de un juicio abreviado, aceptó el cargo de homicidio culposo séxtuplemente agravado por conducción imprudente, negligente y antirreglamentaria, bajo la influencia de estupefacientes y con un nivel de alcohol en sangre de 1,02 gramos por litro, por exceso de velocidad, culpa temeraria, y por la pluralidad de víctimas y lesiones culposas agravadas. Las víctimas fueron Nicolás Carabajal e Ignacio Abosaleh.
La decisión de liberarlo bajo caución juratoria se llevó a cabo desde la Comisaría 3ra de Tres de Febrero, por orden del juzgado a cargo del magistrado Eduardo Adrián Campos, quien lo había condenado.
El cantante fue condenado por la muerte del trompetista de su banda (Carabajal) y de su asistente (Abosaleh), quienes viajaban en la parte trasera de la camioneta Honda CRV que él conducía la noche del 20 de julio de 2019 en la ruta 63, en Dolores, cuando ocurrió el vuelco. Iban rumbo a Villa Gesell para un recital, y en el asiento del acompañante viajaba la bailarina Romina Candia, quien resultó herida y fue internada, aunque sin riesgo vital.
Después de pasar diez días en el Hospital Municipal San Roque de Dolores, Castiñeiras recibió el alta médica y fue trasladado a la Comisaría N° 1 de Chascomús. Posteriormente, lo trasladaron a la Alcaidía N° 3 de Melchor Romero, en La Plata, donde sufrió una fractura de pierna mientras jugaba al fútbol. Tras ser operado, se le concedió el beneficio del arresto domiciliario, en el cual continuó con su carrera y grabó nuevas canciones.