María Antonia de San José fue beatificada en 2016 en Santiago del Estero luego de que el Papa autorizara la publicación de un milagro. Luego, en octubre de 2023, el sumo pontífice aprobó el milagro y será canonizada en las próximas horas.
La curación de la hermana religiosa Vanina Rosa en 1905 fue el primer milagro atribuido a Mama Antula, mientras que la recuperación de un hombre de un accidente cerebrovascular a comienzos del siglo XIX constituye su segundo milagro por el cual será canonizada, destacó la historiadora y difusora de la historia de la beata, Graciela Ojeda de Río.
Según explicó Ojeda Río, para que una persona sea beatificada y luego canonizada por la Iglesia Católica, “se lleva un proceso canónico establecido por normas y leyes de la iglesia con Juan Pablo II”. Además, sostuvo que la normativa indica que cuando muere una persona tiene que tener “características de santidad” y llevarse a cabo una investigación sobre los milagros atribuidos.
En ese sentido, destacó que para la segunda instancia, se necesitaba probar “otro milagro más, que de ser reconocido por la Iglesia, le da la posibilidad de ser canonizada”, y reconocida en todo el mundo.
Ese segundo milagro es el que se da en la provincia de Santa Fe con la curación del hombre que tuvo un accidente cerebrovascular (ACV) que lo dejó en un estado muy difícil y serio por lesiones que, según los médicos, no se iban a poder curar.
Entonces, “le rezaron a María Antonia y se produjo el milagro de su curación. La historia clínica fue enviada a Roma para ser evaluada por nueve médicos distintos de otras partes del mundo”. Los profesionales no encontraron explicación lógica de la recuperación, por lo que el Vaticano lo volvió a analizar y estableció la curación se debió a la participación milagrosa de María Antonia.
De esta forma, Mama Antula se convertirá en la primera santa argentina con una ceremonia que se hará en la Plaza San Pedro.
Historia de Mama Antula, la primera santa argentina
La beata es considerada la primera defensora de los derechos humanos en Argentina. Cintia Suárez, coautora de su biografía junto con Nunzia Locatelli, explicó que Mama Antula se comprometía con “personas que eran consideradas cosas en la época de la colonia”.
Además, la biógrafa cuenta que el mensaje de quien será la primera santa argentina fue “muy fuerte para su tiempo e inspira a mujeres incluso hasta hoy”. Cuando llegó a Buenos Aires luego de caminar a pie más de 4.000 km, la confundieron con una “bruja” e incluso le arrojaron piedras, lo que la hizo refugiarse en una capilla.
Cada día empezó a volverse más popular e influyente y se hizo respetar frente al obispo y al virrey de Buenos Aires, quienes al principio se negaron a recibirla. Sin embargo, luego el obispo le otorgó el permiso para abrir su casa espiritual.
“Tenía mucho coraje y era rebelde en el buen sentido. La llamaban la mujer fuerte. Usó su astucia femenina en un contexto de prohibición”, destacó.